Escondido entre las cumbres de la Sierra de Rubió, entre los gigantes modernos, encontraréis una de las joyas góticas de la Anoia.El Castell de Rubió queda encajado entre los antiguos castillos de Maçana y de Ardesa, pero este último, ya en el siglo XI, se encuentra demasiado expuesto. Rubió acontece un espacio perfecto, no solo para controlar la plana de Rubió, la Cuenca de Òdena y la Segarra, sino también el paso milenario del antiguo camino de basto que conecta el Baix Llobregat con la Segarra calafina, un paso flanqueado por dólmenes megalíticos.En la órbita de los Cardona, los castlans de Rubió se suceden entre los grandes linajes anoiencs: Claramunt, Calders, Castellolí... Todos tuvieron un papel, pero quizás el más relevante fue el de una mujer: Francesca de Timor, que dejó una huella imborrable que solo podréis descubrir en la iglesia fortificada de Santa Maria.A tener en cuenta:
Precio: 3,00€ por persona.Fechas: cuarto domingo del mes a las 12:00 h.